Deja de ponerte todas las mañanas esa 'máscara' de felicidad. Solo hace que cuando llegues a casa estés peor. Tranquila, nadie se va a dar cuenta de que estas mal, y si se dan, no se van a molestar en ir y preguntarte que te pasa. Ley de vida. Tu estás para todos, pero luego para ti no hay absolutamente nadie.
Al fin y al cabo siempre acabas igual, sola, en tu cuarto, llorando. No se. Lo pienso y no le encuentro el sentido.
Soy demasiado fácil de complacer y no pido tanto. Entonces, ¿por qué es todo tan difícil?
Que razón llevas cuanto más te esperas peor.
ResponderEliminarMe encanta tu blog, te sigo :))
Muchísimas gracias!
EliminarYo también te sigo :)
A veces las cosas que resultan mal parecen ser la constante, y las buenas son la contada excepción.
ResponderEliminarNo obstante, se sigue intentando.
Muchas gracias :)
ResponderEliminar