viernes, 4 de octubre de 2013

I'm fine

¿Y esto? ¿Cuantas veces te ha pasado? Vacío en el pecho. Nudo en la garganta. Ojos húmedos. Ya sabes lo siguiente. Te espera una larga noche. 
Tranquila, respira. Tu puedes. Eres fuerte y puedes con todo. La vida te pone obstáculos para que aprendas a saltarlos, y a lo mejor con el primero caes, incluso con el segundo, pero al tercero ya sabes que hacer, salir adelante. No hay otra opción. 
Lloras. Te muerdes los labios para no gritar con todas tus fuerzas ni acabar a puñetazos con la pared de tu habitación, por miedo a que se noten los moratones en tus nudillos. Pero los verdaderos moratones son los que nadie ve, los que llevas dentro. Los daños que están en tu mente, que no puedes sacar de ningún modo.
Pero, ¿sabéis? Llorar no significa ser débiles. Significa que llevas demasiado tiempo siendo fuerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario